Plaza de toros de Manzanares (Ciudad Real). Media entrada. Cornúpetas con el hierro de Las Monjas, desiguales de juego. Los mejores 3º y 6º, «Soñador», nº 21, de pelo castaño, con 525 kilos y nacido en diciembre de 2015, premiado con la vuelta al ruedo tras pedírsele el indulto por parte del público y no concederse por el palco.
Enrique Ponce (Rosa palo y oro): 1 oreja y Silencio.
Curro Díaz (Grana y oro): Ovación y 1 oreja.
Sergio Serrano (Caña y oro): 2 orejas y 2 orejas y rabo.
Un verdadero puñetazo en la mesa ha dado esta tarde en la plaza manchega de Manzanares, Sergio Serrano. Puesto que aunque se trate de un coso de tercera categoría, la dimensión que ha ofrecido el torero albaceteño ha sido enorme, delante además de dos figuras del toreo y ante las cámaras de televisión.
La tarjeta de presentación de Sergio Serrano hoy en Manzanares ha sido una larga cambiada y un sensacional manojo de verónicas en el saludo al tercero. El astado de Las Monjas ha tenido movilidad y transmisión, si bien le ha faltado clase. Sergio Serrano le ha cuajado una faena maciza, que define el momento que atraviesa un torero, siempre entregado, con mucha verdad y asentamiento de plantas, aprovechando la inercia del toro en la arrancada. Cierra el trasteo con unas manoletinas en las que se ha pasado muy cerca al burel. Estocada algo trasera. Dos orejas.
El sexto, para el que se ha llegado a solicitar el indulto por parte del público, ha tenido nobleza y ritmo en la embestida aunque se ha echado en falta más bravura y empuje. Soberbio Sergio Serrano, que ha instrumentado dos series de naturales sencillamente extraordinarias, por el temple, la despaciosidad con la que ha llevado embebido al toro y la reunión con el mismo. Ha puesto a la plaza de Manzanares en pie. Tras esto, se ha pedido el perdón de la vida para el animal de Las Monjas, prosiguiendo con su faena Sergio Serrano. Finalmente, se le ha instado desde el palco presidencial a que estoqueara a la res, finiquitándolo de una estocada en todo lo alto. Dos orejas y rabo para Sergio Serrano y vuelta al ruedo para «Soñador».
Enrique Ponce ha tenido que emplearse a fondo técnicamente con el primero de la función, ya que había que cogerle muy bien las alturas y las distancias para extraerle lo que llevaba dentro. Seria actuación del diestro de Chiva, que ha firmado una postrera tanda de naturales, notable. Estocada corta arriba. Una oreja.
Con el cuarto no ha tenido ninguna posibilidad de lucimiento Enrique Ponce. Toro soso y muy parado, que dura apenas un suspiro en el tercio final. Lo intenta el matador valenciano pero poco más cabía hacer. Estocada caída. Silencio.
El lote de Curro Díaz no ha sido nada fácil. El segundo, al que le ha enjaretado un magnífico saludo capotero, se ha defendido en la faena de muleta, quedándose muy corto. Muy dispuesto el espada de Linares, que lo pasaporta de dos pinchazos y un golpe de verduguillo. Ovación.
Mucha vergüenza torera ha demostrado Curro Díaz frente al quinto, un toro mirón, que siempre estaba con el torero y que nunca venía metido en los trastos. Poco le ha importado eso al linarense, que ha derrochado entrega y valor, llevándose una fuerte voltereta y librándose por fortuna de un serio percance. Estocada desprendida. Una oreja.
En las cuadrillas destacar a Óscar Castellanos (Curro Díaz), que saluda después de colocar las banderillas al segundo, y Fernando Casanova y Diego Valladar (Sergio Serrano) al parear al tercero.
Los tres toreros han salido del coso de Manzanares andando por la puerta de cuadrillas.